Las fracturas de cadera casi se duplicarán en 2050, según un estudio

17 de junio de 2023


De todas las fracturas relacionadas con la osteoporosis, las fracturas de cadera son las que causan mayor morbilidad, con tasas de mortalidad registradas de hasta el 20-24% en el primer año tras la fractura. La pérdida de funcionalidad e independencia entre los supervivientes es notable: el 40% no puede caminar de forma independiente y el 60% necesita ayuda un año después. Las fracturas de cadera representan un serio problema de salud pública en todo el mundo, suponen una carga muy pesada para los pacientes y sus familias, así como también un coste considerable para los sistemas sanitarios.

En el estudio publicado recientemente ‘Epidemiología mundial de las fracturas de cadera: Tendencias seculares en la tasa de incidencia, el tratamiento posterior a la fractura y la mortalidad por todas las causas’ un grupo investigadores reveló que, si bien las tasas de incidencia de fracturas de cadera estandarizadas por edad y sexo disminuyeron en la mayoría de las regiones, se prevé que el número de fracturas de cadera en todo el mundo casi se duplique para 2050 en comparación con 2018. Asimismo, se observó una brecha significativa en el tratamiento posterior a la fractura para la prevención de fracturas para ambos sexos en todos los países y regiones, especialmente en los hombres.

«Los hallazgos de este estudio ponen de manifiesto la necesidad urgente de mejorar las estrategias de prevención y atención de las fracturas de cadera. Esto debería considerarse tanto una advertencia como un llamado a la acción para los sistemas de salud de todo el mundo. Algunos estudios anteriores han demostrado que entre el 5% y el 10% de los pacientes con fractura de cadera vuelven a tenerla y que, de ellos, hasta el 23% se produce en el año siguiente a la primera fractura de cadera y el 70% en los primeros cinco años. Está claro que la gran disparidad en el tratamiento de la osteoporosis, que según el estudio es aún mayor en los hombres que en las mujeres, es inaceptable. Los sistemas sanitarios deben actuar. Un primer paso es dar prioridad a la implementación de programas de cuidados post-fractura, como las Unidades Coordinadoras de Fracturas (FLS), para garantizar que cualquier persona mayor que haya tenido una primera fractura de cadera reciba el tratamiento y la atención necesarios para prevenir nuevas fracturas potencialmente mortales», declara el Profesor Cyrus Cooper, presidente de la Fundación Internacional de Osteoporosis (IOF) y coautor del estudio.

El estudio analizó los datos de una cohorte representativa de 19 países de Oceanía, Asia, Europa y América del Norte y del Sur. Se examinó la incidencia de fracturas de cadera, el tratamiento posterior a la fractura y la mortalidad por todas las causas después de fracturas de cadera, entre pacientes de 50 años o más, desde 2005 hasta 2018. Se trata de un estudio único porque, a diferencia de los informes anteriores sobre la incidencia de fracturas de cadera que se basan en datos con heterogeneidad en las fuentes de datos, los períodos de estudio y los enfoques analíticos, aplicó un protocolo estandarizado y un modelo de datos común en todos los sitios para proporcionar datos comparables. Las tasas de incidencia de fractura de cadera estandarizadas por edad y sexo se calcularon utilizando como patrón la población mundial de las Naciones Unidas en 2020. El número de fracturas de cadera en 2030, 2040 y 2050 se proyectó basándose en las tendencias de las tasas de incidencia y los datos del Banco Mundial. En los 12 meses siguientes a las fracturas de cadera, se estimaron el tratamiento posterior a la fractura (definido como la proporción de pacientes que reciben medicación contra la osteoporosis) y las tasas de mortalidad por todas las causas.

El estudio identificó 4.115.046 casos de fractura de cadera en la cohorte, y los principales hallazgos fueron los siguientes:

  • Las tasas de incidencia de fracturas de cadera estandarizadas por edad y sexo variaron ampliamente, desde 95,1 (Brasil) hasta 315,9 (Dinamarca) por 100.000 habitantes.
  • La mayoría de los países y regiones mostraron una tendencia decreciente en la incidencia de fracturas de cadera, con los descensos más pronunciados en Dinamarca (-2,8% anual), Singapur (-2,8%) y Hong Kong (-2,4%). Los mayores aumentos se observaron en los Países Bajos (+2,1%), y Corea del Sur (+1,2%).
  • A pesar de la disminución general de la incidencia de fracturas de cadera, se estima que el número total de fracturas de cadera casi se duplicará de 2018 a 2050.
  • Dentro del año siguiente a una fractura de cadera, el tratamiento posterior a la fractura se mantuvo bajo, oscilando entre el 11,5% en Alemania y el 50,3% en el Reino Unido.
  • Las tasas de mortalidad por todas las causas un año después de una fractura de cadera oscilaron entre el 14,4% (Singapur) y el 28,3% (Reino Unido), mientras que las tendencias de mortalidad variaron entre el -5,3% y el +18,4% anual.
  • Los hombres recurrían menos a la medicación contra la osteoporosis que las mujeres, presentaban tasas más elevadas de mortalidad por todas las causas y un mayor aumento del número de fracturas de cadera previsto para 2050

«Una de las principales conclusiones del estudio es que la disminución de la incidencia de fracturas de cadera por edad y sexo observada en numerosos países en los últimos años no compensará el impacto global del envejecimiento de la población. Por tanto, la carga de la fractura de cadera seguirá incrementándose, dando lugar a un aumento de la dependencia, la morbilidad y la mortalidad, y generando unos costes socioeconómicos inmensos para los servicios sanitarios de todo el mundo, cuyos recursos son escasos. Ha llegado el momento de actuar. La IOF insta a los sistemas de atención sanitaria a abordar la brecha en el tratamiento mediante políticas específicas e intervenciones multidisciplinares para reducir el impacto de la fractura de cadera en las próximas décadas», cloncluye el profesor Nicholas Harvey, presidente del Comité de Asesores Científicos de la IOF.

2023-12-13T20:14:07+00:00