Expertos piden una mayor implicación política en la prevención de la fractura por osteoporosis

21 de julio de 2022


Las fracturas por fragilidad son un grave problema sanitario y social en nuestro país, ya que cada año se producen 330.000 nuevas fracturas, con un gasto sanitario de 4.300 millones de euros. A pesar de esta situación, existe una escasa concienciación, tanto social como política, sobre la gravedad de la osteoporosis y de las fracturas por fragilidad en particular, así como de su carga económica a largo plazo, algo que podría reducirse con una estrategia y coordinación adecuadas.

Con el objetivo de priorizarla prevención secundaria de las fracturas óseas a través del desarrollo de políticas efectivas a nivel nacional es uno de los principales objetivos por los que nace la Plataforma para la Prevención de la Fractura por Osteoporosis. Se trata de una iniciativa promovida por la International Osteoporosis Foundation (IOF), enmarcada dentro del programa Capture the Fracture y que cuenta con el apoyo de la compañía biofarmacéutica UCB y la biotecnológica Amgen.

Esta plataforma, a través de la colaboración de todos los agentes implicados, pretende minimizar el impacto de las fracturas y mejorar la calidad de vida de las personas con osteoporosis y, por tanto, disminuir la presión económica que las fracturas por fragilidad ejercen en nuestro Sistema Nacional de salud.

En palabras de Remedios Martel, una de las coordinadoras de este ambicioso proyecto, “con esta plataforma nos hemos propuesto un doble objetivo: por un lado, servir de altavoz de una enfermedad que, a pesar de su incidencia y gravedad, no se percibe como seria y, por otro, servir de punto de encuentro de todos los agentes implicados para, juntos, desarrollar soluciones efectivas”.

Las fracturas causadas por osteoporosis supusieron en España un gasto sanitario de 4.300 millones de euros y se prevé que en 2030 la cifra alcance los 5.500 millones de euros. “Estamos hablando de una carga económica significativamente más elevada que la de otras enfermedades crónicas no transmisibles, pero esta cantidad podría rebajarse con estrategias adecuadas y una mayor coordinación”, apunta Carmen de Aragón, otra de las coordinadoras de la Plataforma para la Prevención de las Fracturas por Osteoporosis.

Problema social y económico
Se trata no solo de un problema económico, sino sobre todo social, ya que las fracturas óseas causadas por fragilidad están asociadas a una mayor morbilidad y mortalidad (poner el dato de al año, el 20% fallece), pero también llegan a duplicar el riesgo de sufrir otra fractura. “Necesitamos que exista un abordaje global que permita identificar a las personas en riesgo y prevenir fracturas secundarias, por lo que es crucial que tanto profesionales como pacientes sean conscientes de esta situación”, explica Carmen de Aragón.

Por su parte, tal y como indica el Dr. Philippe Halbout, presidente de la International Osteoporsis Foundation (IOF), “la implantación de modelos de atención coordinados y multidisciplinares es, sin duda, un paso necesario tanto para mejorar el abordaje de la enfermedad, y la calidad de vida de los pacientes, como para reducir el coste sanitario y social que supone”.

Teniendo en cuenta esto, “desde la Plataforma, queremos que la prevención de la fractura por osteoporosis se incluya en la agenda política nacional y regional y tome el protagonismo que debería tener en las diferentes políticas y estrategias de salud, así como en los programas de envejecimiento saludable, donde hasta ahora apenas se ha tenido en cuenta su impacto”, incide Remedios Martel

Además de las dos coordinadoras, la Plataforma para la Prevención de las Fracturas por Osteoporosis cuenta con un comité científico formado por seis profesionales sanitarios con perfiles muy relacionados con el abordaje desde diferentes ámbitos de la fractura (cuáles?)

Infradiagnóstico e infratratamiento
La escasa sensibilidad que tienen la sociedad y los profesionales sanitarios sobre la importancia de la osteoporosis, unido al limitado acceso a pruebas específicas para el diagnóstico de la osteoporosis, repercute en un retraso en la detección de la enfermedad. Tanto es así, que el seguimiento del circuito asistencial de un paciente que ha sufrido una fractura osteoporótica evidencia el infradiagnóstico y la ausencia de acciones que garanticen la adherencia al tratamiento.

“El 80% de las personas que han tenido, al menos, una fractura por fragilidad carece de diagnóstico, no son correctamente identificadas y, por tanto, no reciben el diagnóstico ni el manejo posterior que debieran”, comenta el Dr. Santiago Palacios, miembro del comité científico de esta nueva plataforma. “Además de las cerca de 1,8 millones de mujeres susceptibles de tratamiento para la osteoporosis en nuestro país, solo 656.000 reciben un tratamiento. Más de 1,1 millones de mujeres continúan sin tratamiento para la osteoporosis”.

Puntos críticos y áreas de mejora
Así, desde la Plataforma de Prevención para la Fractura por Osteoporosis se han detectado los puntos críticos que hacen necesario impulsar acciones que beneficien al paciente, al Sistema Nacional de Sanidad y a la sociedad en general.

“Entre estos puntos de mejora hay que tener en cuenta la importancia de mejorar la comunicación entre atención primaria y especializada, ya que el primer nivel desarrolla un papel clave en la detección temprana de potenciales pacientes con riesgo alto de sufrir fracturas por fragilidad”, apunta el Dr. Palacios. “El abordaje del paciente que ha sufrido una primera fractura requiere de un equipo multidisciplinar que esté integrado por las distintas especialidades que, de forma directa o indirecta, intervienen en el proceso asistencial de este tipo de pacientes.

“De la misma manera -continúa el Dr. Palacios-, urge implementar guías de práctica clínica que recojan pautas de actuación que permitan diagnosticar, tratar y realizar un seguimiento adecuado de aquellos pacientes que hayan sufrido una primera fractura, así como incrementar el conocimiento que la población tiene sobre la enfermedad y su principal consecuencia, la fractura”.

Modelos multidisciplinares
Entre los puntos de mejora también se incluye la necesidad de normalizar a nivel nacional la creación de Unidades de Coordinación de Fracturas en todos los hospitales a lo largo de la geografía nacional. Según el Dr. Antonio Naranjo, otro de los miembros del comité científico, “se trata de un modelo multidisciplinar de atención dirigido a los pacientes que ya han sufrido una fractura por fragilidad. Hemos comprobado que son la estructura organizativa más eficaz para incrementar la evaluación y el tratamiento después de cualquier fractura.

Este tipo de estructuras ha conseguido reducir el riesgo de sufrir nuevas fracturas y el riesgo de muerte asociada. “En España hay hasta el momento 59 Unidades de Coordinación de Fracturas además de una veintena más que está en proceso de aprobación, pero es una cifra que es claramente insuficiente para tener una prevención secundaria efectiva”.

Unido a la creación de un mayor número de Unidades de Coordinación de Fractura, se encuentra la creación de un código protocolizado de diagnóstico en mujeres mayores de 50 años que pueda estar consensuado a nivel nacional con el fin de permitir la detección de nuevos casos y establecer un tratamiento adecuado con rapidez. “Además, hemos de potenciar la creación de registros y auditorías integrales de fracturas que nos permitan tener una imagen lo más real posible de la situación para tomar medidas lo antes posible”.

Comité Científico multidisciplinar
La Plataforma para la Prevención de la Fractura por Osteoporosis está formada por un comité científico multidisciplinar con perfiles clínicos que engloban todos los ámbitos de abordaje y tratamiento de la fractura por osteoporosis.

José Ramón Caeiro: Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Santiago de Compostela especialista en Cirugía Ortopédica y Traumatología. Doctor por la Universidad de Vigo, obteniendo el Premio Extraordinario de doctoramiento de dicha Universidad. Ha sido presidente de la Sociedad Gallega de Cirugía Ortopédica y Traumatología (SOGACOT) y de la Sociedad Española de Fracturas Osteoporóticas (SEFRAOS). Actualmente, es jefe de Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología en el CHUS.

Cristina Carbonell. Licenciada en Medicina por la Universidad Central de Barcelona, especialista en Medicina Familiar y Comunitaria y Doctora en Medicina por la UAB. Profesora de la Universidad de Barcelona, tiene una amplia trayectoria en Medicina Familiar y, actualmente, desempeña su labor en el Centro de Salud Vía Roma de Barcelona. Los últimos 20 años ha dedicado gran parte de su carrera al ámbito de la osteoporosis.

Antonio Naranjo: Licenciado en Medicina y especialista en Reumatología. Actualmente es reumatólogo del Hospital de Gran Canaria Dr. Negrin. Asimismo, desempeña los cargos de co-coordinador de la unidad FLS del Hospital Dr. Negrín; presidente de la Sociedad Canaria de Reumatología y profesor titular de Medicina de la ULPGC.

Manuel Naves: Licenciado y doctor en Biología e investigador en el campo del metabolismo óseo y mineral con 9 proyectos como investigador principal y más de 100 publicaciones. Actualmente es especialista en metabolismo óseo en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), y presidente de la Sociedad Española de Investigación Ósea y del Metabolismo Mineral (SEIOMM).

Santiago Palacios: Licenciado en Medicina por la Universidad Complutense de Madrid, y especializado en Ginecología y Obstetricia. En 1982, obtiene el título de Doctor «Cum Laude». En 1989 fundó la primera Unidad de Menopausia de España en la Fundación Jiménez Díaz de Madrid. Actualmente, es Director del Instituto Palacios de Salud y Medicina de la Mujer, y, además, es Presidente de la Fundación Hispana de Osteoporosis y Enfermedades Metabólicas Óseas (FHOEMO)

Pilar Sáez: Licenciada en Medicina y especialista en Geriatría. Ha trabajado en 4 Servicios de Geriatría, participando en programas de organización sanitaria con la implantación de Unidades de Ortogeriatría en 3 de ellos. Actualmente es coordinadora del Registro Nacional de Fracturas de Cadera (RNFC).

Asimismo, cuenta con el apoyo de diversas instituciones científicas como la Asociación Española para el Estudio de la Menopausia, la Fundación Hispana de Osteoporosis y Enfermedades Metabólicas Óseas, el Registro Nacional de Fracturas de Cadera la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición, la Sociedad Española de Investigación Ósea y del Metabolismo Mineral, y la Sociedad Canaria de Reumatología.

Además, como una de las primeras acciones, desde la Plataforma para la Prevención de la Fractura por Osteoporosis se ha iniciado una ronda de encuentros con diversas instituciones con el objetivo de lograr un mayor apoyo como socios institucionales con este propósito. Actualmente, esta iniciativa cuenta ya con el aval de la Asociación Española para el Estudio de la Menopausia, la Fundación Hispana de Osteoporosis y Enfermedades Metabólicas Óseas, el Registro Nacional de Fracturas de Cadera la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición, la Sociedad Española de Investigación Ósea y del Metabolismo Mineral, la Sociedad Canaria de Reumatología y la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia.

“Nuestro propósito es continuar trabajando en esta línea, y desde aquí aprovechamos para hacer un llamamiento a todas aquellas organizaciones e instituciones que estén sensibilizadas con esta problemática para que puedan unirse a esta plataforma y tener así el máximo apoyo posible”, concluye Carmen de Aragón.

2023-02-02T14:19:10+00:00